
No queda tan lejos, ni en tiempo ni en el espacio, (27 de mayo de 1992 durante el asedio de Sarajevo) que cayeron diversos morteros sobre la gente que hacía cola para comprar pan detrás del mercado de Vase Miskina. Murieron 22 personas y quedaron malheridas muchas más. Conmovido por este hecho, Vedran Smailovic, violonchelista local de renombre, decide bajar al lugar del bombardeo durante los 22 días siguientes y tocar 1 adagio en sol menor de Albinoni por cada víctima mortal. Y es este acto de homenaje lo que ha inspirado al autor Steven Galloway a escribir esta novela.
La novela, escrita de manera sencilla, sin grandes complicaciones, relata tres historias (fictícias) de tres personas diferentes, cada una de ellas con una manera distinta de sobrevivir al cerco de Sarajevo durante la guerra de Bosnia. Kenan, un padre de família que a menudo tiene que emprender un peligroso viaje hasta la otra punta de la ciudad para conseguir agua potable para su familia. Dragan, un hombre solo a punto de jubilarse que cada día cruza la ciudad para conseguir alimento en la panadería donde aún en tiempos de guerra trabaja. Y Flecha, una hábil francotiradora encargada de proteger al violonchelista durante los 22 días que durará su homenaje a las víctimas.
La novela, escrita de manera sencilla, sin grandes complicaciones, relata tres historias (fictícias) de tres personas diferentes, cada una de ellas con una manera distinta de sobrevivir al cerco de Sarajevo durante la guerra de Bosnia. Kenan, un padre de família que a menudo tiene que emprender un peligroso viaje hasta la otra punta de la ciudad para conseguir agua potable para su familia. Dragan, un hombre solo a punto de jubilarse que cada día cruza la ciudad para conseguir alimento en la panadería donde aún en tiempos de guerra trabaja. Y Flecha, una hábil francotiradora encargada de proteger al violonchelista durante los 22 días que durará su homenaje a las víctimas.
Ninguno de ellos estaba preparado para la guerra, para esquivar balas en los puentes, para acostumbrarse a convivir con la muerte, el miedo... Ninguno de ellos son héroes, ni valientes, ni temerarios; simplemente se adaptan a la realidad que les ha tocado vivir.
Si todavía no has empezado a leer el libro de moda, ésta novela, sin venir precedida por grandes campañas de publicidad, creo que conseguirá sobrecogerte y replantearte tus propios valores como lo hizo conmigo por la dureza de los hechos relatados.